![]() |
SEBASTIÁN DE MARISANCENA Y MENDINUETA ALFÉREZ REAL DE CARTAGO |
A este distinguido caballero le fueron encomendados en su época, trabajos de mucha importancia intelectual. No obstante, las múltiples dificultades de aquellos tiempos, mantuvo permanente contacto con la Sociedad Científica Francesa y correspondencia directa con el gobierno español que lo honró con marcadas manifestaciones de confianza, entre ellas, por mensaje especial le fueron recomendados los sabios varones de Humboldt y Bompland.
![]() |
CASA MARISANCENA O CASA DEL VIRREY |
Don Sebastián era un hombre enérgico, generoso y emprendedor como pocos, y de espíritu público inimitable. Por su propia cuenta, y sin tener en cuenta las propias erogaciones, acometió la construcción del antiguo ´´Camino del Quindío´´
![]() |
Antiguo Camino del Quindío |
![]() |
Trabajos de construcción del Camino del Quindío |
![]() |
Pintura, capilla antiguo caserío San Sebastian de la Balsa fundado en 1791 |
Don Sebastián viajó a España durante el reinado de Carlos III, quien, lo ennobleció, lo hizo caballero de Alcantara y lo nombró Alférez Real Perpetuo de Cartago. Le concedió escudo de armas y le dio la facultad de cincelarlo en el portalón que sirve de entrada principal a la mansión donde vivió durante toda su vida. El escudo se haya enmarcado por 14 florones de fina talla, dentro del arco que forman dos columnas de estilo romántico que sostiene un arquitrabe (cornisa, friso o borde) del mismo estilo.
![]() |
ESCUDO DE ARMAS |
Otra de las recompensas que recibiera don Sebastián, del Rey, en pago a sus ingentes servicios, fue el privilegio ´´De Cadena´´, la cual consistía en indultar a todo condenado a muerte que al pasar por el portón de su casa, logrará cogerse del ´´aldabón´´ (llamador).
Del 26 de septiembre de 1787 en adelante le fue concedido a don Sebastián, el favor de usar en su apellido, cuatro letras más, pues antes de esa fecha se apellidaba únicamente Sancena. Este es en términos generales la semblanza, de este ilustre cartagüeño que sirvió a su tierra y fue objeto de merecidas y bien ganadas distinciones por sus realizaciones altamente progresistas y por su capacidad de servicio. De él podría decirse además, que fue el intérprete fiel de los bizarros monarcas en estas apartadas regiones y que finco sus esperanzas en el grávido suelo de sus mayores con la misma abnegación.
Don Sebastián de Marisancena y Mendinueta muere en Cartago en 1825.
Fuentes: Libros: Cartago en la Historia, de Daniel Arturo Gómez.
Historia Leyendas y Personajes de Cartago, de Daniel Caicedo Gutiérrez
Casa de la Cultura, municipio de Alcalá.
No hay comentarios:
Publicar un comentario